"No podemos leer lo que pasó ayer en Sanlúcar y no preguntarnos por esas entidades financieras, por la realidad, no podemos sufrir lo de ayer y no investigar cuántas viviendas están en propiedad de esos bancos, casas, pisos... y no pensar en cuántos niños pequeños están siendo víctimas de la usura... de la desidia de tantos, de la infinita codicia de ellos, de su insoportable ausencia de condición humana...
Hablemos de Ellos, de los de Arriba, ya... Ya no basta con gritar al alcalde. Es hora de empezar a gritar a los verdaderos Amos"
Desalojo de familias en Sanlúcar de Barrameda, miércoles, 22 de marzo de 2017
MÁS DESALOJOS... SEÑALEMOS, YA, A LOS QUE DE VERDAD MANDAN
Ayer, miércoles, día 22 de marzo de 2017, la tragedia volvió a visitarnos, tan tranquila, tan cómoda, aquí, en Sanlúcar de Barrameda. Varias familias presenciaron, con sus hijos pequeños delante (ocho familias, cinco menores, y nuestra mirada a la alcantarilla), con su dignidad apuñalada, cómo decenas de antidisturbios les desalojaban, les echaban de sus viviendas, sin previo aviso, sin palabras, sin lenguaje, sin humanidad. Esas familias, esos seres humanos están ahora, al parecer, en un albergue social en El Puerto de Santa María, aquí no, en Sanlúcar no.
Pero vamos a lo que vamos, también es urgente. Sin dejar de denunciar la sumisión, la esclavitud, el espíritu de comerciales de esos políticos que dicen representarnos (porque los llamados ciudadanos les votan), parece necesario cambiar, o al menos simultanear, el discurso.
No hay, en absoluto, ninguna posibilidad de cambio si los intentos de denuncia, de cambio, se quedan sólo en señalar a esos impresentables personajes secundarios.
Existen, a nuestro entender, dos planos bien diferenciados de la realidad. El primero es el inmediato, el que nos obliga a criticar, señalar lo que esos lacayos están dispuestos a hacer, al servicio de sus amos, al servicio de esos a los que probablemente deben mucho dinero.
Sin embargo, existe otro plano, el de verdad, el que nos interesa. Me refiero al Poder Real. Al poder que, con obscena exhibición, ostentan las grandes empresas, el Poder Financiero.
Hace ya algunos años, pensamos que era gratificante comprobar cómo gentes, en principio no dispuestas a pensar, cansadas, ciudadanos de la tercera edad, y de otras edades, empezaban a despotricar de los bancos. Fue consecuencia, sí, del 15-M.
Ahora, la inercia del supuesto debate político, el que Ellos quieren que contemplemos, nos arrastra, y nos diluye.
Decía Susan George que las acciones deben ser inteligentes y apuntando siempre a quien de verdad ordena.
Decía Gramsci que si no hay una hegemonía cultural, mediática, creada desde abajo y sacudiendo las conciencias, y mostrando lo que está por debajo, entonces esa hegemonía de comunicación, de pensamiento, sólo la tienen ellos. No hay posibilidad de cambio, de revolución, sí, de revolución, si no conseguimos dar con los mensajes necesarios, con los mensajes nuevos, con los de siempre tantas veces olvidados. Todo esto viene a pedir que salgamos del agujero, a pedir que, sin dejar de señalar a las patéticas marionetas, señalemos, ya, a los que de verdad mandan.
No podemos leer lo que pasó ayer en Sanlúcar y no preguntarnos por esas entidades financieras, por la realidad. No podemos sufrir lo de ayer y no investigar cuántas viviendas están en propiedad de esos bancos, casas, pisos, terrenos solares deshabitados, desocupados... y no pensar en cuántos niños pequeños están siendo víctimas de la usura... de la desidia de tantos, de la infinita codicia de ellos, de su insoportable ausencia de condición humana.
Se hace imprescindible conocer la cifra exacta de viviendas que conforman esos extraordinarios parques inmobiliarios en manos de las entidades financieras. La cifra de verdad, no sólo las de las viviendas que sacan a la luz. Conocer la cifra de viviendas sin gente, viviendas que esperan el momento más oportuno para la especulación más brutal, y conocer también el origen de esas viviendas: cómo han llegado a ser propiedades de esos bancos tan amables.
Se hace imprescindible saber cuál es la relación del Ayuntamiento con los distintos bancos, con cuáles tiene cuentas abiertas, a cuáles les debe dinero.
Se hace imprescindible exigir la inmediata cancelación de cuentas públicas entidades bancarias que ejecutan salvajes desahucios.
Se hace imprescindible conocer la cifra exacta de viviendas que conforman esos extraordinarios parques inmobiliarios en manos de las entidades financieras. La cifra de verdad, no sólo las de las viviendas que sacan a la luz. Conocer la cifra de viviendas sin gente, viviendas que esperan el momento más oportuno para la especulación más brutal, y conocer también el origen de esas viviendas: cómo han llegado a ser propiedades de esos bancos tan amables.
Se hace imprescindible saber cuál es la relación del Ayuntamiento con los distintos bancos, con cuáles tiene cuentas abiertas, a cuáles les debe dinero.
Se hace imprescindible exigir la inmediata cancelación de cuentas públicas entidades bancarias que ejecutan salvajes desahucios.
Hablemos de Ellos, de los de Arriba, ya.
Todavía recuerdo cómo no pasó nada cuando nos enteramos de que todos los españolitos pusimos 12.000 millones de euros para rescatar, maldita palabra, a Cantaluña Banc. Y luego, el gobierno, nosotros, se lo cedimos al BBVA por unos milloncitos, ¿600, 800? poquita cosa.
No entremos en su inercia, apuntemos, sin dejar de nombrar a los criados, a quien de verdad manda.
Ya no basta con gritar al alcalde. Es hora de empezar a gritar a los verdaderos Amos.
Ya no basta con gritar al alcalde. Es hora de empezar a gritar a los verdaderos Amos.
Hagámoslo. Es urgente.
Por último, como sabemos que existen muchos banqueros, muchos políticos, que son creyentes, que son católicos, que van a misa todos los domingos, y que, incluso, a veces leen la Biblia en público (y, probablemente, volverán a hacerlo), les dejamos algunas citas extraídas de ese libro,
gggggggggggggggPor último, como sabemos que existen muchos banqueros, muchos políticos, que son creyentes, que son católicos, que van a misa todos los domingos, y que, incluso, a veces leen la Biblia en público (y, probablemente, volverán a hacerlo), les dejamos algunas citas extraídas de ese libro,
"COBRAS USURA E INTERESES, Y TE APROVECHAS DE TU PRÓJIMO CON EXTORSION… TE DISPERSARÉ ENTRE LAS NACIONES Y TE ESPARCIRÉ POR LOS PAÍSES, Y ASÍ ELIMINARÉ TU IMPUREZA" ('EZEQUIEL')
"SI TU HERMANO SE QUEDA EN LA MISERIA Y NO TIENE CON QUE PAGARTE, TÚ LO SOSTENDRÁS COMO SI FUESE UN EXTRANJERO O UN HUÉSPED, Y ÉL VIVIRÁ JUNTO A TI. NO LE EXIJAS NINGÚN CLASE DE INTERÉS: TEME A DIOS Y DEJA QUE VIVA EN TU CASA" ('LEVÍTICO')
"NO EXIGIRÁS DE TU HERMANO INTERÉS DEL DINERO, NI INTERÉS DE COMESTIBLES, NI DE COSA ALGUNA QUE SE SUELE EXIGIR INTERÉS" ('DEUTERONOMIO')
"NO EXIGIRÁS DE TU HERMANO INTERÉS DEL DINERO, NI INTERÉS DE COMESTIBLES, NI DE COSA ALGUNA QUE SE SUELE EXIGIR INTERÉS" ('DEUTERONOMIO')