"La última oportunidad de recuperar el significado de la palabra 'democracia'. La última oportunidad para creer que la voz de los ciudadanos todavía puede tener sentido y consecuencias... para demostrar, por si alguien todavía no lo ha percibido, que vivimos en una democracia aparente, desahuciada...
Los que mandan en el BCE, y en el FMI, no ha sido votados por nadie y, sin embargo, rigen el destino del planeta, deciden lo que se puede hacer, y lo que no. Son los contables del poder encubierto, los sicarios del Mal..."
GRECIA, LA ÚLTIMA OPORTUNIDAD
La última oportunidad de recuperar el significado de la palabra 'democracia'. La última oportunidad para creer que la voz de los ciudadanos todavía puede tener sentido y consecuencias. La última oportunidad de desvelar la esencia criminal que se aloja en los significantes Unión Europea. La última oportunidad para demostrar, por si alguien todavía no lo ha percibido, que vivimos en una democracia aparente, desahuciada. De demostrar que los pueblos europeos, sobre todo los del Sur (ahí estamos nosotros), no son soberanos, que las decisiones que determinan sus vidas no son decisiones democráticas, son decisiones tomadas por los lacayos del poder financiero que domina el mundo.
La última oportunidad para decir a las claras que estamos en guerra y que nos están masacrando. No vemos los tanques, pero los muertos están ahí, encima de la mesa, y ya son demasiados.
Se está ocultando, o comentando muy poco, que una de las condiciones que el legítimo gobierno griego quería incluir en sus negociaciones con esos hombres de negro, era la de presionar más fiscalmente a las grandes fortunas, a las grandes empresas, y que ellos, los representantes de la mafia, dijeron que de eso nada. Es decir, que los que debían pagar eran los de siempre, los de abajo, pensionistas, asalariados, parados...
Todavía hay gente que no sabe que los Estados (nosotros) ponemos el dinero del BCE. Curiosamente, luego el BCE no puede prestar dinero a esos países. Sólo puede hacerlo a los bancos privados, a un interés entre el 0% y el 1%. Y ya ellos nos lo prestan a nosotros (Grecia, España...) a un interés que va entre el 6% y el 7%, cuando menos. ¿Se puede ser más imbécil? Todo esto se aprobó mientras los pueblos, también son culpables, no se enteraban de nada. Se estableció el régimen abierto de la omertá sin límites.
Los que mandan en el BCE, y en el FMI, no ha sido votados por nadie y, sin embargo, rigen el destino del planeta, deciden lo que se puede hacer, y lo que no. Son los contables del poder encubierto, los sicarios del Mal.
Y son los que tachan de hereje a un presidente legítimo, votado por su pueblo, no como ellos, simplemente porque decide consultar con sus compatriotas una decisión trascendental para sus vidas... a la hoguera con él. ¿Ya nadie recuerda lo que pasó con Papandreu?
Todavía hay gente que no sabe que los Estados (nosotros) ponemos el dinero del BCE. Curiosamente, luego el BCE no puede prestar dinero a esos países. Sólo puede hacerlo a los bancos privados, a un interés entre el 0% y el 1%. Y ya ellos nos lo prestan a nosotros (Grecia, España...) a un interés que va entre el 6% y el 7%, cuando menos. ¿Se puede ser más imbécil? Todo esto se aprobó mientras los pueblos, también son culpables, no se enteraban de nada. Se estableció el régimen abierto de la omertá sin límites.
Los que mandan en el BCE, y en el FMI, no ha sido votados por nadie y, sin embargo, rigen el destino del planeta, deciden lo que se puede hacer, y lo que no. Son los contables del poder encubierto, los sicarios del Mal.
Y son los que tachan de hereje a un presidente legítimo, votado por su pueblo, no como ellos, simplemente porque decide consultar con sus compatriotas una decisión trascendental para sus vidas... a la hoguera con él. ¿Ya nadie recuerda lo que pasó con Papandreu?
En las películas que tratan sobre la mafia hay una escena que siempre se repite: aquella en que el jefe mafioso le pega una paliza a alguien hasta dejarlo medio muerto, o muerto del todo. No lo hace por ninguna razón concreta. Lo hace simplemente para avisar a los demás, para dejar claro quién manda aquí. Eso es lo que están haciendo con Grecia, nos avisan a todos. (Ver Tony Soprano se hace respetar)
"Muchos llevan por aquí demasiados años, tienen un encargo, vienen decididos a arrancar de cada expresión su significado... todas las palabras del lugar se han intoxicado", dicen los chicos de Vetusta Morla ('Alto').
Y ahí estamos. ¿Cuáles son ahora los significados de las palabras democracia, justicia, equidad, soberanía, libertad, fraternidad?
Cuando se miran en el espejo, esas palabras ya no se reconocen. Se han cubierto de sombras, les han vaciado su alma, están muertas. Convivimos con ellas todos los días, pero ya no responden. Y, sin embargo, nosotros seguimos manoseándolas, hasta que desparecen.
Puede que lo que Grecia esté haciendo sea abrirnos los ojos para que empecemos a recordar nuestro idioma, nuestra historia.
Puede que la cuna de la democracia tenga como destino universal recuperar esa democracia, cómo era la música y cuál era el texto.
Pero necesita de todos.
¿De verdad nos creemos todos los españolitos las patrañas que cuentan nuestros no representantes? ¿De verdad creemos que lo que le ocurre a Grecia no nos puede pasar a nosotros, no nos está pasando ya?
La deuda, ilegítima en gran parte, de Grecia no se puede pagar de ninguna de las maneras, y ellos lo saben. Y la nuestra, la española, tampoco, también lo saben.
Pero mientras tanto se lo están llevando todo, todo lo que era nuestro y ya habíamos pagado, nosotros, nuestros padres, nuestros abuelos... (Sanidad, Educación, Pensiones, Empresas de los Sectores Estratégicos, etc.).
Mientras tanto, nos estrangulan. ¿Hasta cuándo?
Todavía hay gente que no sabe nada, y que prefiere seguir así, sin saber nada, sin asumir responsabilidades.
Recordamos otra vez: allá por el 600 a. de C., Solón de Atenas prohibió los préstamos que los ricos y poderosos hacían a los más débiles, porque vio que las deudas que contraían los iban convirtiendo en esclavos.
Pues eso, que tenemos que acabar otra vez con Vetusta Morla, "este mundo pide a gritos un castigo, un insulto, una grieta, un vendaval, un shock profundo, pide a gritos un final "
Todavía hay gente que no sabe nada, y que prefiere seguir así, sin saber nada, sin asumir responsabilidades.
Recordamos otra vez: allá por el 600 a. de C., Solón de Atenas prohibió los préstamos que los ricos y poderosos hacían a los más débiles, porque vio que las deudas que contraían los iban convirtiendo en esclavos.
Pues eso, que tenemos que acabar otra vez con Vetusta Morla, "este mundo pide a gritos un castigo, un insulto, una grieta, un vendaval, un shock profundo, pide a gritos un final "
'A LAS MUSAS' de Solón de Atenas (fragmento)
"De la riqueza no hay término alguno fijado a los hombres, pues ahora entre nosotros quien más bienes tiene el doble se afana. ¿Quién puede saciarlos a todos? Las ganancias, de cierto, las dan a los hombres los dioses y de ellas procede el desastre, que Zeus de cuando en cuando envía como castigo, y ya uno, ya otro lo recibe."